Ivan Cruz Osorio –México–

Oaxaca 1980, poeta, editor, crítico literario y gestor cultural. Es Licenciado en Lengua y Literaturas Modernas Inglesas por la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. Actualmente es codirector y editor de Malpaís ediciones. Fundó y co-organizó Vértigo de los aires. Encuentro Iberoamericano de Poetas en la Ciudad de México (de 2007 a 2011). Fue becario del programa Jóvenes Creadores del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes durante el periodo 2009-2010, en el área de poesía.

Entre sus poemas destacan por su autoría de los poemarios como: Tiempo de Guernica”, Editorial Praxis, 2005, “Contracanto”, Malpaís, 2010 y “Dogma”, de próxima aparición.

Poemas suyos aparecen en diversas antologías nacionales e internacionales como “Cajita de música”. “Poetas de España y América del siglo XXI”, Madrid: AEP, 2011; “Vientos del siglo”. “Poetas mexicanos 1950-1982”, UNAM/UANL, col. Poemas y ensayos, 2012; “Cartografía de la literatura oaxaqueña actual II”, Editorial Almadía, 2012; “Resistencia en la tierra”, Antología de poesía social y política de nuevos poetas de España y América (Editorial Ocean Sur, 2014) y “Antología General de la Poesía Mexicana”, “Poesía del México actual de la segunda mitad del siglo XX a nuestros días”, Editorial Océano, 2014. Compiló y prologó el volumen “Lumbre en el almaje”. “Muestra de poesía mexicana”, 1970-1985, Guatemala: Editorial Catafixia, 2012.

Andrés Bello

Navegué toda la noche

con la mirada fija en los días por delante,

con el miedo apretado en los puños.

Algo de la Tierra que dejé atrás

ha labrado mi sombra y mi abismo,

y aún no sé de qué patio,

de qué puerto sin brillo partí

con los sueños desvanecidos.

Pero sé que no habrá regreso,

porque nadie vuelve

para atizar los rescoldos

de su propia ceniza.

Francisco de Miranda

Cuando era joven, yo quería recorrer los puertos,

andar entre los hombres que ríen de películas mudas

y escriben cartas de amor

a rostros que se esfumaron

con el corazón de aserrín en la mano.

Cuando era joven, y los ejércitos

marchaban su hambre y su pasión ingenua

sobre barcos llenos de himnos y fantasmas,

yo quería conocer las tabernas,

a las mujeres que dan apretones de mano

y te aman sin recelo

entre acordeones y lámparas de alcohol.

Yo quería pelear por un país

con mi bicornio y mi fajín francés,

yo quería bombardear un continente,

hacer una revolución de mutilados

que ocuparan los escaparates

de los grandes palacios,

para que una mujer de rencores obscenos

y una soledad madura

viniera a amarme.

Cuando era joven, yo quería recorrer todos los puertos,

caminar las ciudades,

las acequias de pescadores descuidistas,

detenerme en los farolitos de cada esquina

hasta encontrar a esa mujer

que me amara por amor.

A Benjamín Morales