José Aguilar -Guatemala-

Buenos Aires, Chiantla, Huehuetenango, 1997.

Cazador de símbolos. Escritor. Jardinero. Maestro. Arquitecto.

Su obra literaria ha sido incluida en las antologías: Modelo 90: Muestra de poetas guatemaltecos

nacidos en la década de 1990 (Proyecto editorial Los zopilotes, 2019), U Poética: Antología

poética universitaria (USAC, Guatemala, 2020), Fragua de preces (Abra Cultural, España, 2020),

El ser que nos habita (Cafeína Editores, 2020), Salir del Engaño (Parutz ́ Editorial, 2022), entre

otras. Su trabajo de investigación ha sido publicado en: Viento Fuerte / ensayos sobre otros

conocimientos y sus contextos en el arte contemporáneo (Guatemala-Costa Rica, 2022).

Su libro Pequeñas rutas de un azacuán con frío fue seleccionado por Metáfora editores en el año

2020 como ganador del segundo Certamen Nacional de Poesía Joven.

Primer Concilio sobre el cuerpo sin sombra

Creo en mi cuerpo

sobre todas las cosas

fruta prohibida que cuelga del árbol

éxodo de sufrimientos antiguos

códice de trampas livianas

testigo de numerosas caídas

palabra dos veces negada.

Creo en mi cuerpo

templo de todos mis símbolos

profeta de tristes memorias

sacrificio que duerme en sitios profanos

huesos torcidos haciendo una jaula

mi propia jaula

sangre infectada embriagando las penas

mis propias penas.

Templo incendiado que a pocos alumbra

templo incendiado que a pocos calienta.

Creo en mi cuerpo

sobre todos los símbolos

mi cuerpo es un altar

le pongo velas

le pongo aceites

lo adorno con piedras

lo adorno con flores

lo lleno de inciensos

le riego agua florida

le riego aguardiente y hiel.

Cuerpo altar de todos mis muertos

cuerpo altar de todas mis muertas.

Creo en mi cuerpo

ofrenda que yace sobre los viejos altares

lo envuelvo en pañuelos rasgados

para ahuyentar los dolores de siempre

lo impregno de hierbas ancianas

para no morir de cansancio

le rezo de cerca

para que me muestre los sitios

por donde puedo caminar descalzo

le rezo de lejos

para que me muestre los sitios

por donde debo caminar con cuidado.

Lo velo todas las noches

lo velo todos los días

en sacrificio pensado

en martirio asumido

en ceremonia escogida.

Cuerpo

ofrenda robada

cuerpo

ofrenda quemada

cuerpo

ofrenda con bordes amargos

cuerpo ofrenda

con manchas lavadas

pero al final de cuentas

cuerpo enteramente humano.