Negma Coy – Guatemala –

Es artista maya Kaqchikel, originaria de Chi Xot – Comalapa en Iximulew – Guatemala.

Escribe poemas, historias y cuentos en idioma maya kaqchikel, en español y con glifos mayas. Es tejedora, pintora, actriz y docente. Le han publicado los libros: XXXK’, Soy un búho, Lienzos de herencia, A orillas del fuego, Tz’ula’ – Guardianes de los caminos y la Colección Kikotem – Historias, cuentos y poesía kaqchikel. Negma Coy trabaja en comunidad con diferentes colectivos para que el arte de los pueblos siga floreciendo. Ha participado en festivales de arte y de poesía a nivel nacional e internacional.

Sonidos de corazones

Abuela Ixchel, abuela maestra, guardiana del tejido

¿Cuál es el sonido de tu corazón el día de hoy?

Vengan…

Vidas en kumatzin

sagrado fuego danzante

abuela luna eclipsada

búho cantor del tiempo

fertilidad de Mamá Tierra

ríos sixageantes en escondites nocturnos

estrellas que destellan caminos nuevos

zumbidos delirantes de verdades ahogadas

sagrados cerros mensajeros de augurios 

pieles que se funden con mi nawal

conexión de energías en distintas dimensiones

alegrías y miradas de generaciones tiernas 

Vengan… 

Aniden en mi Ser

Vibren, palpiten en mis manos

Aquí recibo la voz de cada corazón.

Pum pum, pum pum, pum pum, pum pum

escuchen mi estruendoso corazón kaqchikel

Pum pum pum pum, pum pum pum pum

Abuela Ixchel

mis manos hilan momentos

mis manos devanan sabiduría

mis manos urden el conteo del tiempo

mis manos tejen la historia

tejen la fuerza de nuestras abuelas y abuelos

tejen las luchas de nuestras madres y padres

tejen verdades

tejen resistencia

tejen comunidad

tejen conocimientos en espiral

Mi tejido y yo

un solo latido

Un corazón que habla, que canta, que cuenta, que silba, que trenza, que siembra

que revela la vida en un lienzo.

¿Cuál es el sonido de tu corazón el día de hoy?

Los colores de mi bandera

Mi huipil es mi bandera

mi idioma maya kaqchikel es mi bandera

mi espiritualidad es mi bandera

mi arte es mi bandera

mi tejido, los hilos son mi bandera

el cholq’ij, el haab’ son mi bandera

la milpa y el frijol son mi bandera

mis libros son mi bandera

la ciencia y la tecnología maya son mi bandera

mi pueblo y mi gente son mi escudo

mi fuerza es mi herencia

la palabra es la esencia

y mis hijos son mi libertad.

¿Cómo se llama este tiempo?

Las grandes empresas se creen dueños de las tierras, las multinacionales matan árboles y animales 

y hacen de mi hogar su finca.

Papá lluvia viene con miedo, las milpas están dejando de tener cuatro hijos, los ríos esconden sus caminos

Y los árboles de membrillo lloran por las tardes.

¿Como se llama este tiempo?

La corrupción, el genocidio, el feminicidio, la vanidad, la morbosidad se mofan de la pobreza, mientras festejan untando oro en su pan francés, para después gritar el himno nacional de esta Guate-mala.

La guerra nos sigue anclando hasta el agujero negro de un cielo falso, de ese cielo del que tanto hablan los ladrones de cuello blanco.

Por más de 500 años de despojo y racismo y 200 años de independencia criolla, siguen sangrando las manos de mi padre, siguen sangrando el vientre de mi Madre Tierra…

Cholq’ij

Prrr  prrr  prrr  ut  ut  ut  ut  ut  q’uq’  q’uq’  q’uq’  xpumuuuy  xpumuuuy

Están, estiran sus alas de búho guardián, levantan nuestras plumas de quetzal herido

nos sacuden con fuerza y a veces marcan nuestro cuerpo como al jaguar

zanjean nuestro Ser, surquean nuestro pecho, abren el camino que conecta al inframundo

ahí está, en la punta de la espiral encuentran la cicatriz de contrición.

La luz nos alcanza ¡Bendita claridad! Estamos aquí en el peldaño número nueve

tz’uj, tz’uj, tz’uj centellean los ríos viajeros, las aguas medicina, las que llaman

nos susurran al alma, pero cuando es necesario sin piedad rujen su nombre:

Abuela – Abuelo, Madre – Padre, día – noche, viento, agua, cielo, tierra, tierra, Madre Tierra

pom, rosas, kuxa, ruda, encendamos nuestro ocote y fumemos algunos puros de tabaco.

Que truene, una dos y tres veces que truene ¡Abramos el tercer ojo!

el tiempo arcoíris ha llegado, la metamorfosis de nuestro corazón asustado está cerca

se anunciará con tambor y chirimilla, con chinchines y ocarinas, sí, se anunciará

la muerte y también la vida. Tiembla, nace, crece, florea, amamanta y repite

tiembla, nace, crece, florea, amamanta la ofrenda, la palabra, el número de vida.

Desenredemos la palabra para el encuentro, escuchemos la voz de la sagrada vara

desenredemos los hilos para tejer nuestra piel, convertirnos en jun b’atz’ jun chowen

que los tz’ula’ nos lleven de la mano, ellos marcan el camino, vamos

hablemos con el corazón del cielo, tierra, viento, agua, hablemos con el corazón

seamos fuego, montaña, mar, volcán, colibrí, seamos espíritu y remolino de media noche.

Como aguaceros de mayo 

Ni ruda, ni chilco

ni aceite de almendras

solo llorar

como bebé con cólicos

a media noche, a medio día

llorar por querer liberar mi espíritu

inocente atrapado en la enredadera de tu amor

patalear y desaparecer los pasos que me llevaron a vos

para no regresar

para no buscarte en los delirios nocturnos

delirios como relámpagos

delirios como truenos

como aguaceros de mayo.